La llegada de la primavera trae consigo un clima más cálido y soleado, pero también trae consigo ciertos riesgos para la piel. Desde la Clínica Sánchez del Río queremos informar a nuestros pacientes sobre cómo la primavera puede afectar a la piel y dar consejos sobre cómo mantenerla sana y protegida durante esta época del año.
Índice
Alergias primaverales y la piel
La primavera es la época del año en la que muchas personas sufren alergias estacionales, causadas principalmente por el polen y otros alérgenos que flotan en el aire. Estas alergias pueden afectar no solo la nariz y los ojos, sino también la piel, provocando picazón, enrojecimiento y erupciones cutáneas.
Es importante recordar que la piel es la primera línea de defensa contra los alérgenos, por lo que es importante mantenerla limpia e hidratada durante la primavera. Se recomienda el uso de productos de limpieza suaves y sin fragancia para evitar la irritación de la piel, y la aplicación de cremas hidratantes para mantenerla suave y protegida.
Mayor exposición al sol
La primavera es también la época del año en la que la exposición al sol aumenta significativamente. A medida que las temperaturas se vuelven más cálidas, es común pasar más tiempo al aire libre, ya sea en la playa, en el parque o en el jardín.
Es importante recordar que la exposición al sol sin protección adecuada puede tener graves consecuencias para la piel. Los rayos UV pueden dañar la piel, causando quemaduras solares, envejecimiento prematuro de la piel y, en casos extremos, cáncer de piel.
Se recomienda el uso de protector solar con un SPF de al menos 30, aplicándolo generosamente en todas las áreas expuestas de la piel, incluyendo la cara, el cuello, las manos y los brazos. Además, es importante evitar la exposición directa al sol durante las horas más intensas del día, generalmente entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde.
Cambios de temperatura y la piel
La primavera también trae consigo cambios en la temperatura, que pueden afectar la piel de diversas maneras. Las fluctuaciones en la temperatura y la humedad pueden hacer que la piel se seque y se agriete, lo que puede llevar a una mayor susceptibilidad a las infecciones.
Para mantener la piel en buen estado durante la primavera, es importante mantener una buena hidratación, beber mucha agua y aplicar cremas hidratantes regularmente. Además, es importante evitar tomar duchas o baños demasiado calientes, ya que el agua caliente puede eliminar los aceites naturales de la piel, lo que puede provocar sequedad y picazón.
Personas con patologías cutáneas
Para las personas que padecen patologías cutáneas, como la rosácea, la llegada de la primavera puede ser especialmente difícil. Las fluctuaciones en la temperatura y la exposición al sol pueden provocar brotes de rosácea, lo que puede ser incómodo y doloroso. La rosácea es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que afecta principalmente la cara. Los síntomas incluyen enrojecimiento, ardor, hinchazón y pequeñas protuberancias en la piel. La exposición al sol, el calor y el ejercicio pueden empeorar los síntomas. Por eso, es importante que las personas con patologías cutáneas tomen medidas adicionales para cuidar su piel en primavera.
Cuidados para la piel
Para cuidar nuestra piel adecuadamente en primavera, es importante seguir algunos consejos. En primer lugar, es importante usar protector solar diariamente, incluso en días nublados. Un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30 protegerá nuestra piel de los dañinos rayos UV.
También es importante usar ropa adecuada. La ropa con protección UV puede proteger nuestra piel de los rayos solares, mientras que la ropa ligera y transpirable puede ayudar a prevenir la sudoración excesiva y la irritación.
Además, es importante mantener nuestra piel hidratada. El uso de cremas hidratantes puede ayudar a prevenir la sequedad y la picazón. También es importante evitar el uso de productos que contengan alcohol y perfumes, ya que pueden irritar la piel.
Para aquellas personas con patologías cutáneas, como la rosácea, es importante seguir el tratamiento prescrito por su dermatólogo. Al igual que es importante evitar los desencadenantes conocidos, como la exposición al sol y el calor.
La primavera puede ser una época maravillosa del año, pero también puede afectar nuestra piel de diversas maneras. Es importante seguir los consejos anteriores para cuidar adecuadamente nuestra piel y, si notamos cualquier cambio en nuestra piel, es importante acudir a un profesional para recibir el tratamiento adecuado. En Clínica Sánchez del Río contamos con un equipo experto en dermatología y cuidados de la piel. Si tienes cualquier consulta puedes escribirnos a cualquiera de nuestras redes sociales tanto en Facebook como en Instagram o llamarnos al 985 208 407
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